El Torito se vio obligado a tocar todos los bailes que se habían pagado, cuyo dinero se había embolsillado el manager.
Y fue tan generoso, que lo despidió, pero dejó el asunto así, y no judicializó el caso.
La historia se repitió recientemente con Raymond Y Miguel, con un encargado de contabilidad que le hizo un hoyo de 15 millones de pesos que había que pagar a Impuestos Internos.
¡Tuvieron que pagar unos impuestos que ya tenían como pagados!
Y como “buenos cristianos”, tampoco llevaron a la justicia el caso…
¡Que santos son Raymond y Miguel! Dejaron el asunto así, y han preferido hacer sus inversiones en los Estados Unidos, donde residen con sus respectivas familias (uno en Miami y otro en New Jersey). Pero se juntan aquí cada 15 días, cuando viajan al país para grabar su programa de humor o participar en los rodajes de las películas donde actúan, como la actual “Los Leones”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
comenta sin restrinciones todo lo que quiera